
Al otro día fue con mi mama a comcel de Sao paulo porque la linea esta a nombre de ella.
Primero pidieron el turno, esperaron el turrno y no hay donde sentarse, despues cuando el tablero mostro su numero fueron donde la asesora, le explicaron como fue el robo y tambien le explicaron que necesitaban la sim porque el trabajo de mi hermano depende mucho del celular a parte de que también paga un plan de voz y datos ilimitados de 120.000 pesos.
La asesora le pidió la cédula a mi mama y ella le mostró una contraseña y le explico que lleva mas de un año y medio sacando la cédula y que por problemas de la registraduria no se la han entregado y que por eso le dieron una contraseña mientras tanto, y la asesora le contesta que hasta que no tenga la cédula no pueden hacer nada y mi mama le dice y le explica amablemente que no es culpa de ella que si por favor le pueden colaborar o que le de alternativas de que puede hacer y la asesora le contesta que ponga un denuncio diciendo que se le perdió la cédula ( a bestia). Bueno entonces mi mama y mi hermano salen aburridos y con mucha rabia de comcel, mi hermano dice malpa..... de comcel no voy a pagar la cuenta de celular!!!! se sienten impotentes porque no se puede hacer nada sin la cédula y llegan muy bravos a la casa.Mas tarde me cuentan y yo le digo a mi mama que volvamos a bajar y que busquemos la manera de solucionar el problema que a ellos tampoco les conviene tener un cliente bravo e insatisfecho.
llegamos otra vez a comcel y pedimos hablar con el director o gerente y le contamos y en menos de 5 minutos nos resolvio el problema.
En conclusión el servicio no fue malo, porque después mi hermano salio contento con su celular nuevamente, pero es allí donde las empresas deben preguntarse hasta donde limitan a sus empleados en servicio o la falta de vocación o iniciativa de servicio que tienen sus empleados y mas importantes los que tienen alto contacto con los clientes finales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario